Quiénes Somos

   

     Hola me llaman Fran soy venezolana, casada, mamá full time, licenciada en administración y me encanta la fotgrafía. Me inicié en el running y la práctica de yoga hace 2 años. Cuando inicie con el yoga lo hice escuchando que lo único que necesitaría era mi cuerpo, mente, ropa cómoda y ganas de practicar, y eso es cierto no hay manera de refutarlo, pero a medida que fui profundizando en la práctica te vas encontrando con factores que pueden volver tu primera experiencia algo no muy agradable, y darte la excusa de no continuar si no estás convencido del todo. Quien no se ha encontrado con compañeros que te hacen sentir, sin querer, un tronco por su elongación? una remera que se suba, una calza que se te baja o un mat que te resbala!!!!! Haz experimentado un perro hacia abajo y que se te resbalen las manos? que tu práctica trascurra preocupada en aferrarte al mat? O tener que estar en cuatro apoyos y te molesten las rodillas?

     A medida que mi práctica fue avanzado y con el transcurrir del tiempo, seguí el consejo de mi profesora y decidí comprarme mi propio mat.  Porque allí iba a fluir mi energía, era mi espacio y además para cuidar la necesaria sanidad personal. Decidida me surgió la incógnita “Que mat me compro? Me compre uno de diseño espectacular, tan bello que me daba pena tener que pisarlo y bastante costoso, pero error que sea bonito y costoso no quiere decir que sea el mejor!

    De allí surgió mi curiosidad por desarrollar y ofrecer el mejor mat,  empecé a indagar y como cualquier tema o hasta la misma práctica de yoga, entras a un mundo que ni te imaginabas que existía, a saber los porqué de espesores, materiales, densidades y otras cualidades que descubrí en mi búsqueda. Comencé a conocer marcas que van más allá de las clásicas colchonetas de gym para hacer abdominales o los que se desgranan bajo tus manos con el tiempo, hasta diseños ecológicos y sustentables que respetan el medio ambiente.

    Akasha en sanscrito significa Eter, espacio y/o materia primordial. Donde puedes respirar, sentirte, escucharte y observar sensaciones. Un mat, esterilla, tapete o alfombra, o como decidas llamarlo,  será tu espacio personal donde aprendes a fluir a tu propio ritmo, siendo autentico y libre. Donde el yoga, elongación, pilates, meditación y cualquier práctica, será la que tú sientas y la que quieras vivir.  Recuerda tu  Mat tiene que ver contigo, tu estilo de práctica y la sensibilidad de tu cuerpo.

    Son metros cuadrados que deben ofrecerte confort, adherencia, lo que te permite concentrarte, interiorizar y conocerte, sin que te afecten aromas sintéticos. Por un tema de higiene y que sostiene tu espacio energético debe ser personal. Espero que este mat lo disfrutes igual que yo y que mi Akasha se vuelva, tuyo. Tú espacio tu energía.     

Namasté